Los fondos de inversión en España tienen varias ventajas fiscales frente a otras formas de inversión, lo que los convierte en una opción muy interesante para gestionar el ahorro a medio y largo plazo. Aquí te detallo las principales:
Ejemplo: Si inviertes en un fondo A, y luego lo traspasas al fondo B, no tributas por la ganancia acumulada en A. Solo tributarás cuando vendas definitivamente tu participación en B.
1. Diferimiento fiscal
- No pagas impuestos mientras no vendas tus participaciones.
- Puedes cambiar de un fondo a otro sin tributar por las plusvalías (traspaso entre fondos).
- El impuesto solo se paga cuando reembolsas definitivamente y obtienes un beneficio.

2. Compensación de pérdidas y ganancias
- Cuando vendas participaciones, puedes compensar las ganancias con pérdidas (de ese año y los 4 años anteriores).
- También puedes compensar con rendimientos del capital mobiliario (hasta un 25% de los rendimientos netos).
3. Tributación solo sobre la ganancia
- Solo tributas sobre la plusvalía real (precio de venta menos precio de compra), no sobre el total retirado.
4. Retención automática y sencilla
- Hacienda aplica una retención del 19% al reembolso del fondo (no a los traspasos).
- Esto simplifica el pago de impuestos y se refleja en la declaración del IRPF.
5. Integración en la base del ahorro
- Las ganancias tributan en la base del ahorro, con tipos impositivos más bajos que la base general:
Hasta 6.000 € | 19% |
6.000 – 50.000 € | 21% |
50.000 – 200.000 € | 23% |
Más de 200.000 € | 27% |
6. Beneficios fiscales en sucesiones o donaciones
- En algunos casos, las plusvalías latentes en los fondos no tributan al fallecer el titular (se heredan con valor actualizado).